¿Puede un famoso equivocarse? ¿Su salud mental no cuenta?

 Estamos rodeados de mucha gente conocida, influencers, actores, cantantes... y estamos tan acostumbrados a ver lo que viajan, los proyectos que realizan, los eventos que visitan, lo que compran, lo que visten... que los idealizamos por completo, tanto a su vida como a ellos mismos. 

Fuente: unsplash

Creo que esto es peligroso, y voy a ligarlo al tema de cancelar a las personas. Actualmente, es muy usual ver cómo una gran parte de los que consumen contenido cancelan a una persona famosa por un fallo cometido. 

Por un lado, entiendo que hay veces que puede resultar incluso necesario. Hay algunas personas que desaprovechan muchísimo la influencia que tienen, normalmente suele ser por comentarios o contenidos subidos que o bien ofenden a algún colectivo, o difunden información falsa, o comparten malos hábitos... y hay que tener en cuenta que esta gente tiene mucho poder sobre el público (sobre todo en menores), pues influencian de una manera bastante impresionante en su vida, siendo modelo de muchos, y además es un hecho que mediáticamente hay mucha gente que no cuenta con las competencias necesarias como para consumir el contenido de forma crítica. 
Sin embargo, hay veces que esta unión de públicos para tachar a una persona supera los límites, pues muchas veces se les mira con lupa y a la mínima se convierten en una diana. Y es que creo que no se les permite el fallo, y hay veces que no nos damos cuenta de ello, no empatizamos lo suficiente, porque es famoso, porque se les trata diferente. Pero hemos de tener siempre presente que son personas como cualquiera que vea su contenido, y no pueden hacerlo todo bien y dar a todo el mundo lo que quiere oír. Hay veces que alguna persona comete algún error obvio, pero no se les da la posibilidad de explicarse o disculparse, pues al minuto de cometerlo, ya se han incendiado las redes sociales con fotos, vídeos, comentarios o memes, en los que comparten el fallo, opiniones, y lo peor de todo, insultos. Y es que en muchos casos, cuando ocurre esto, se llenan las redes de insultos y faltas de respeto hacia la persona conocida. Hay ocasiones en las que resulta incluso hipócrita, pues la gente acaba cometiendo el mismo fallo que la persona que está siendo criticada. El caso es que muy pocas veces se tiene en cuenta lo que le puede suponer a la persona a nivel psicológico, al final también tiene derecho a equivocarse y no le estamos dando ninguna oportunidad de ello. Y aunque creo que es necesario enseñar los errores para poder aprender de ellos y que la gente no los reproduzca, también considero que no se tiene que tratar de manera tan dura ante el mínimo fallo, la gente con tanto reconocimiento sube contenido bajo la presión de saber lo que causa y el impacto que tiene, por lo que el fallo no es difícil. Un ejemplo reciente sobre esto es la polémica sobre el streamer ElXokas. 

Fuente: unsplash

Obviamos por completo la salud mental de la gente famosa solo por el hecho de tener una buena vida (supuestamente, recordemos que enseñan lo que interesa enseñar). Verlos vivir tan bien causa una indirecta prohibición al malestar, si tienen algún problema se silencia porque "no pueden quejarse, que viven muy bien", según dicen. No sabemos que hay detrás de todo lo que enseñan, ni se asocia de manera directa el bienestar mental con el bienestar material, y no tenemos nunca esto presente. Tienen el mismo derecho que cualquier otra persona a no tener un buen día, semana o año, tengan la cantidad de dinero que tengan. Esto a nivel psicológico también tiene que ser muy duro para estas personas, porque les puede resultar imposible verbalizar sus problemas por no sentirse merecedor de expresar su malestar, porque "lo tienen todo". No se les toma enserio en muchas ocasiones en las que intentan manifestar su estado de ánimo, si lloran se les echa en cara que es falso, que por qué se graban llorando, que quién hace eso. Pero luego pasa algo grave y todo el mundo cambia de parecer. Esto me recuerda al caso de la actriz Verónica Forqué.  Esta se apuntó al programa Masterchef, pero decidió abandonarlo bajo la explicación de no encontrarse bien en lo que a salud mental respecta. Esto resultó ser muy comentado en las redes sociales, pero de una manera cómica, la gente no se lo tomó enserio e hicieron memes sobre el momento. 

 

En diciembre de 2021 se la encontraron muerta en su casa, se había suicidado. Ahí las redes sí se llenaron de comentarios pidiendo más recursos y visibilización para la salud mental. Es algo fuerte e impactante, y resulta muy triste que una persona que ha estado tan mal, llegando al punto que ha llegado, consiguiendo verbalizar su malestar, sea foco de risas, y no se le tome enserio hasta que ocurre la tragedia. 

 

Recordatorio importante: todo lo que subo a mi blog lo escribo desde mi punto de vista, estoy abierta a cualquier otra perspectiva, siempre desde el respeto.

Dicho esto, gracias por leerme otra semana más, recordad ser siempre lo más empáticos posibles y pensar bien las cosas antes de publicarlas. 

Cuidaos mucho🌹